La casa en la que vivió el escritor villafranquino Enrique Gil y Carrasco, aloja uno de los restaurantes que son un must en la gastronomía berciana, La Violeta, un local que además de tener una surtida carta bajo la dirección gastronómica de Samuel Naveiro, estrella Michelín, también forma parte de las diferentes apuestas culinarias que se desarrollan en la comarca como las Jornadas Gastronómicas del Bierzo y que se celebran hasta el 12 de diciembre, por ello nos acercamos, para conocer la experiencia gastronómica en el Restaurante La Violeta con productos de temporada de nuestra tierra.
Por ello aprovechamos el buen tiempo y reservamos una mesa en la terraza, es un lujo disfrutar de las vistas a la Plaza del Ayuntamiento mientras se degusta buena comida y eso fue lo que optamos en nuestra visita.
En los primeros platos nos decidimos por el huevo a baja temperatura, botillo del Bierzo, espuma de patata y migas del pastor, atraídos por la impactante presentación en una pieza de vajilla en forma de huevo gigante. ¡Eureka! No sólo es una gran imagen en el plato, te aconsejamos probar esta delicia que mezcla la suavidad y cremosidad del huevo y la espuma de patata con la rotundidad de las hebras de botillo que sirven de base al plato.
También llegaron a nuestra mesa unos raviolis de pasta fresca de perdiz con salsa de trufa, este plato, aunque bien elaborado, no fue tan aplaudido, pero los gustos son subjetivos y seguro que habrá fans de la cocina con ave que lo disfruten. Los garbanzos a la marinera con pulpo y gambas también son exquisitos si optas por un plato de caliente dentro de Jornadas.
Para los segundos, apostamos por la carrillera de cerdo glaseada, compota de pera conferencia especiada y mini puerros confitados, el entrecot con pastel de patata, pimientos asados de El Bierzo y panceta ibérica, dos platos de carne sobre seguro, que conjugan perfectamente la acidez y el dulzor de las frutas estrella de la comarca y también llegó a nuestra mesa el Risotto de setas, gorgonzola y castañas de El Bierzo, otro plato que si eres amante de los arroces, te va a encantar. Intenso de sabor, arroz en su punto y con el suave dulce que dan las castañas.
Para los postres, como solemos hacer, pedimos un variado compuesto por coulant con helado (este plato se demora 10m), tarta de queso, tarta de castañas y el pastel de manzana con helado de canela, de nuevo, una combinación entre el dulce del helado y el ácido de la reineta que explota en el paladar, La Tarta de Castaña casera es suave y para nada pesada, otro gran acierto.
El servicio en todo momento atento a las mesas, aunque los tiempos entre platos, fueron un poco altos, sin llegar a ser excesivos, si bien es cierto que el restaurante estaba lleno en el interior y exterior y esa seguramente fue la causa.
Sin duda el Restaurante La Violeta, es una de las mejores opciones para disfrutar de estas jornadas gastronómicas, además tiene el añadido de que ya te quedas en el casco antiguo y eso invita siempre a dar un paseo por la ciudad antigua que en otoño tiene encanto.
Restaurante La Violeta
Pl. Ayuntamiento, 6
24401 Ponferrada
Tfno: 628 71 86 91
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