La idea de “flâneur” nació en Francia durante el siglo XIX como una especie de descripción de un personaje que pasea con elegancia y curiosidad, disfrutando del arte, la cultura y una filosofía de vida basada en “el buen vivir”.
Hoy ser un flâneur implica ser un conocedor de los placeres refinados de la vida, desde la gastronomía hasta el arte de la conversación. En Ponferrada, el Bierzo y toda la región leonesa, se pueden encontrar muchas oportunidades para cultivar esta actitud apasionada por los placeres y los momentos de disfrute. A continuación, te mostramos algunos pasos esenciales para convertirte en un auténtico flâneur.
Conocer las reglas de los juegos de casino
El buen vivir implica saber disfrutar del ocio, lo cual se expresa de muchas formas, desde ir al teatro y al cine hasta conocer los juegos de azar y disfrutar con ellos, aunque no siempre se gane. Un secreto poco comentado es aprovechar los bonos sin depósito disponibles en este casino para ir poniendo a prueba las habilidades. La astucia y la capacidad de observación se vuelven aliados indiscutibles de los grandes jugadores.
¿Por qué se incluyen a los juegos de casino en este listado? Pues, porque las salas de juegos de azar han sido durante siglos un lugar de encuentro para la alta sociedad, desde la fundación del primer casino en Venecia, hace más de 400 años.
Eso sí, para poder moverse con soltura en este entorno hay que saber las reglas. Desde el blackjack hasta la ruleta, cada juego tiene un reglamento y unas estrategias que todo flâneur debería conocer para moverse con confianza en el entorno.
La herencia de su pasado de alta alcurnia es la etiqueta. Saber cómo vestirse, comportarse y administrar las apuestas forma parte de la experiencia de juego en un casino sofisticado. Los que dominan este arte no solo disfrutan del entretenimiento, sino que también proyectan una imagen de refinamiento y control, aún frente a las pérdidas.
Aprender sobre vinos
Un verdadero flâneur tiene que saber de vinos. No se trata solo de apreciarlos con la nariz y la boca, sino también de conocer su historia, variedades y maridajes, ya que esto aporta profundidad a la experiencia.
Ponferrada y el Bierzo ofrecen una riqueza enológica excepcional, de hecho, la revista Esquire ha puesto su mirada en los vinos del Bierzo, destacando varias etiquetas que han capturado la atención de los expertos y amantes del vino por su calidad.
Parece mentira que durante un tiempo los vinos bercianos, junto con los de Valdeorras y Ribeira Sacra, estuvieron al borde de la desaparición. Sin embargo, tuvieron su reivindicación y han logrado consolidarse como algunos de los más apreciados dentro y fuera de España. La uva Mencía es reconocida por su frescura y carácter, lo que la posiciona como una elección ideal para aquellos que buscan una experiencia de cata inolvidable.
Para ser un verdadero conocedor del vino, es recomendable visitar alguna de las bodegas de la región y asistir a una cata guiada. Aprender sobre las notas de cata, los aromas y el maridaje permite disfrutar de esta bebida regional con un nuevo nivel de profundidad.
Leer por gusto y placer
El conocimiento literario es una de las cualidades que distingue a un flâneur, pero no a través de una currícula obligatoria de lectura.
Es decir, un auténtico “disfrutón” no basa su biblioteca en lecturas recomendadas y novelas de moda, sino que se apropia del conocimiento escondido entre las páginas de los libros y puede saltar de temáticas, autores y calidad de la lectura.
Así como lee El Quijote de Cervantes o los grandes nombres de la literatura francesa como Baudelaire, un flâneur puede disfrutar con cualquier best sellers, libros periodísticos de actualidad o incluso hojear comics y recetas de cocina. El objetivo siempre es disfrutar y admirar, también en la lectura.
Asistir a eventos gastronómicos y visitar restaurantes de renombre
La gastronomía es uno de los pilares en la vida de un auténtico flâneur y afortunadamente Ponferrada y el Bierzo ofrecen una variedad de experiencias culinarias ideales para las personas que disfrutan la comida.
Recientemente, el Hotel de la Real Colegiata de San Isidoro de León fue sede de la presentación de las cuadragésimas Jornadas Gastronómicas del Bierzo, un evento que reúne lo mejor de la cocina de la región. Este evento contó con la presencia de importantes representantes institucionales y gastronómicos, como el presidente del Consejo Regulador de la IGP Botillo del Bierzo y la vicerrectora del campus de Ponferrada, entre otros.
Con la participación de 25 restaurantes, todos ellos recomendables, y 12 bodegas de la D.O. Bierzo, igual de recomendables, las jornadas gastronómicas son una oportunidad perfecta para degustar los mejores productos de la tierra.
En definitiva, un flâneur no solo sabe detenerse a degustar los placeres de la vida, sino que también lo hace con un nivel de profundidad mayor al de otros comensales. Se interesa por su origen, su preparación y su historia.
Hacer un curso de cocina o asistir a una degustación guiada puede ampliar el conocimiento gastronómico y enriquecer la experiencia de cada comida. Desde el botillo del Bierzo hasta las castañas y los pimientos asados, la región ofrece una riqueza culinaria que merece ser explorada.