Se llama Francisco López Fernández y el pasado 22 de enero cumplió un siglo de vida, una cifra redonda en la que el Ayuntamiento en nombre de todos los vecinos le entregó una placa conmemorativa. Pasó el día de cumpleaños en compañía de su mujer y de sus hijos Mariví, Paco y Nilo.
Hace ya muchos años viajó a ‘hacer las américas’ a la República Dominicana junto a más vecinos de Cabañas, pero volvió de nuevo a su tierra al ver que aquello no era lo que contaban.
Ahora descansa en Cabañas y echa de menos dar largos paseos ya que los huesos le duelen, pero goza de buen estado de salud.