El partido que se vivió ayer en el Estadio Ruta de la Plata de la capital zamorana termino con el abandono del estadio por parte del trío arbitral y con el entrenador de porteros del Zamora como improvisado árbitro.
En la recta final del partido el jugador local Luque se lesionó y Movilla entrenador del Zamora solicitó el cambio por Carlos Ramos, jugador que ya había sido sustituido anteriormente. Un cambio que el árbitro Carlos Fernández no permitió, lo que causó el enfado del entrenador local y que llevó a Movilla a declarar la retirada de los suyos. El entrenador de la Ponferradina, Jon Pérez Bolo secundó la propuesta lo que conllevó la retirada del trío arbitral, dejando en manos de jugadores y técnicos el choque en sus últimos veinte minutos.
Bolo respondió sobre el asunto en sala de prensa, explicando que prefería jugar contra once, por una cuestión de preparación y por una cuestión de valores deportivos, ya que así ayudaba al Zamora a prevenir, en la medida de lo posible, alguna nueva lesión por la acumulación de fatiga que supone para un equipo jugar con un hombre menos en pretemporada ante un rival de superior categoría.
Según explica Zamora24 horas el trío arbitral compuesto por José Ignacio, con Perrini y Baselga como linieres, ya habían hablado con los entrenadores anteriormente explicándoles su negativa a que se actuara de esta manera en el supuesto de expulsión o lesión.
Finalmente los últimos minutos se jugaron con el entrenador de porteros y dos compañeros del staff técnico del Zamora como improvisado trío arbitral
TV Castilla y León ha publicado en sus redes el vídeo del momento.
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