Martin Scorsese ha presentado, junto a la escritora de corte satírico Fran Lebowitz, una nueva serie en la plataforma de streaming Netflix bajo el nombre de Supongamos que Nueva York es una ciudad. Desde que ambos se conocieron, hace ya unos años, han mantenido una amistad que ha llevado a algún que otro intercambio creativo entres los dos genios, como el que podemos ver en Public Speaking. En esta cinta documental de 2010, Martin analiza tanto el trabajo, como la vida, de la escritora.
La trayectoria de Scorsese
Martin Scorsese cuenta con una experiencia como escritor, director y productos de cine de más de 40 años. Entre los títulos de este director se encuentran cintas como Casino, en la que vemos a Robert de Niro en la piel de un judío-estadounidense especialista en apuestas llevar las actividades del casino ficticio Tangiers en Las Vegas. La cinta grabada en 1995, quizás incorporaría hoy en día plataformas de casino online, además de uno presencial, ofreciendo un entorno más actual en el que los usuarios pudiesen no solo disfrutar de juegos de casino tradicionales como los de Las Vegas, sino también de este bono sin depósito ofrecido por Bonusfinder y una inmensa variedad de juegos temáticos, como parte de la experiencia online.
Pero el director no solo ha escrito esta película de éxito, sino que también cuenta entre sus éxitos otros como El lobo de Wall Street basado en la vida del corredor de bolsa, Jordan Belfort; o su éxito más actual: El irlandés, una película disponible en la misma plataforma de streaming, y en la que también aparece el viejo conocido Robert de Niro. Pero si hay algo que le gusta a Scorsese es centrar sus películas en novelas, como ya hizo con las tres películas nombradas, cosa que no hace más que demostrar la relación del propio director con la literatura.
Dos genios unidos por la literatura
Por ese motivo, no nos sorprende que se haya vuelto a unir a la escritora estadounidense para crear una nueva producción audiovisual centrado en la ciudad que nunca duerme: Nueva York. La miniserie documental cuenta con 7 capítulos de 30 minutos de duración en los que Lebowitz habla sobre diferentes aspectos de la ciudad, con una temática diferente en cada uno de ellos. Scorsese a su vez hace preguntas a la autora, y no para de reír ante las respuestas de Fran.
Se trata de una producción que tiene en cuenta todos los aspectos de la ciudad, ya sean buenos o malos, como por ejemplo el ruido, los precios de los alquileres, los millones de viandantes o el ritmo acelerado; pero también su arquitectura, la moda o las espectaculares luces y espectáculos disponibles a lo largo de la ciudad. Todo ello con el sello del propio director y la marca de la autora y su literatura, en la que hace referencia a Nueva York y sus habitantes, que han hecho que reciba el sobrenombre de la Dorothy Parker moderna.
Y es que solo dos personajes tan brillantes como Lebowitz y Scorsese, amantes y conocedores de esta ciudad, podían haber creado un proyecto en el que se aprecia la propia dicotomía de lo que Nueva York puede ofrecer a sus habitantes o visitantes, haciéndolo un proyecto único.
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