El fenómeno de La Velada del Año, organizado por el streamer Ibai Llanos, es un acontecimiento que mueve grandes cantidades de aficionados, de dinero y de marketing, desde su primera edición hasta la última de 2025, que congregó a más de 10,8 millones de espectadores simultáneos en Twitch y más de 80.000 asistentes presenciales en el Estadio La Cartuja de Sevilla. Sin embargo, el impacto generado entre streamers y celebridades ha desatado un debate difícil de responder: ¿es este formato un verdadero impulso para el boxeo o una caricatura del deporte?
Récords de audiencia y alcance mediático
Desde su primera edición en 2021, La Velada del Año ha batido récord tras récord en Twitch, desde 1,5 millones de espectadores hasta los 3,8 millones en 2024. La quinta entrega, realizada el 26 de julio de este año, alcanzó la cifra indisputable de 10,8 millones de espectadores simultáneos. Este éxito tangible demuestra el enorme poder de convocatoria que tienen los creadores de contenido, con su capacidad para acercar el boxeo a nuevas audiencias que reclaman esta modalidad incluso en plataformas como las de las apuestas deportivas o canales más tradicionales que no se limiten a Twitch.
Voces críticas: ¿es espectáculo o boxeo real?
La celebración de estas veladas no está exenta de críticas. El boxeador bronce olímpico Enmanuel Reyes Pla tachó el formato como “una aberración”, criticando: “Parecen un par de borrachos tirando golpes al aire”. Para Reyes Pla, el espectáculo ha reemplazado a la esencia y rigor técnico del deporte. Esta visión choca directamente con el enfoque más festivo y mediático de estas veladas.
Apoyo desde dentro del mundo profesional
No todos los profesionales se oponen; algunos ven el lado positivo. Jon Fernández, boxeador de peso pluma, considera que estas veladas representan una “gran publicidad para el boxeo”, lamentando que muchos colegas no valoren la oportunidad que suponen. Lo cierto es que este tipo de eventos abren las puertas a que más aficionados se interesen por las apuestas mma en plataformas como betfair. Por su parte, Sandor Martín, peleador y organizador, reconoce el enorme potencial: “No me imaginaba ver en España a 60.000 personas viendo boxeo”. Eso sí, advierte: “no podemos esperar que La Velada del Año venga a solucionar los problemas endémicos del boxeo español”.
Respeto al deporte… ¿o solo espectáculo?
Aún así, suele argumentarse que, pese a la imagen festiva, el boxeo se trata con respeto dentro de estas veladas. Sandor Martín señalaba que se exige a los participantes reconocimiento médico, licencia federativa y seguro, un nivel de profesionalidad que, en muchos clubes amateurs, no se da. Esto sugiere que, aunque el espectáculo esté presente, el marco institucional y sanitario no es meramente simbólico.
¿Qué aporta realmente el formato “Velada”?
Entre los pros de este tipo de formato se encuentran la masificación y visibilidad masiva para un deporte tradicionalmente minoritario, el hecho de abrir audiencias jóvenes que tal vez nunca se acercarían al deporte y la creación de un puente entre entretenimiento digital y pugilismo amateur.
En cuanto a los contras, existe el riesgo de trivializar el boxeo como un show sin técnica, el potencial eclipsamiento del boxeo profesional y de los atletas formados en sistemas convencionales y unas expectativas irreales: no resolverán la falta de estructura, promoción o inversión en el boxeo formal.
La Velada del Año 6 ¿repetirán el modelo?
La repercusión de este formato llega más allá de 2025. Ya se rumorea sobre La Velada del Año 6, con voces como la del streamer Xokas declarando que si participa, “no es show, es ir allí a matar”. Esto demuestra que, pese a las críticas, las veladas siguen narrándose como eventos competitivos reales, y su evolución puede seguir influyendo en cómo se percibe el boxeo en la era digital.