La ruta que os proponemos es una ruta circular que sube por uno de los márgenes del río Burbia hasta Puente de Rey y retorna a la villa. El recorrido tiene dos opciones, una más corta de 6,6 Km que es bastante sencilla y que nos hace retornar por el otro margen del río y una segunda opción que nos lleva a un alto desde el que divisaremos una panorámica del Bierzo Bajo que es más larga y dura y que nos llevará de nuevo a Villafranca del Bierzo por la montaña que está a su espalda. Esta opción se acerca a los 12 Km.
La ruta se puede comenzar aparcando por ejemplo en el Parque de la Alameda y cruzando por el puente tras la Colegiata para coger el margen contrario del río, desde la playa fluvial. El camino no tiene pérdida y en cualquier cruce que pueda ofrecer alguna duda, la señalización colocada por el Ayuntamiento nos la despejara. También el desvío a los diferentes pozos está indicado.
Entre Puente de Rey y Villafranca del Bierzo, el Burbia circula encajado en el fondo de un angosto valle, casi una garganta, que ha sido tajado por la erosión del río durante millones de años. El río Burbia, es uno de los pocos que no tiene ninguna regulación con embalses en su recorrido, eso ha permitido que los pozos sigan manteniendo sus características. Los pozos son zonas que en verano, nos permitirán disfrutar de un baño en una zona con profundidad. En el camino encontraremos encinas, monte bajo y castaños, en su mayoría secos.
La ruta se inicia de una manera sencilla, prácticamente en llano, lo que la hace perfecta para toda la familia, a partir del pozo de las monjas, donde también veremos los restos de un molino de grano, es desde donde se hace algo más dura pues hay un marcado ascenso que nos llevará a la carretera, donde será un buen sitio para beber agua o tomar un tentempié. Aquí se inicia un descenso por asfalto que nos lleva al pueblo de Puente del Rey. En este punto es donde podremos decidir si continuar el ascenso hacia el mirador (indicado) donde disfrutar de la panorámica sobre el valle, o regresar por el margen contrario del Burbia, el inicio de este camino nos lo marcarán los bloques que tapan la traída de agua hacia Villafranca del Bierzo, regresando por aquí, la ruta no llega a los 7 Km.
En nuestro caso optamos por seguir la ruta trazada por el Ayuntamiento y dirigirnos al mirador, esto supone volver a ascender durante unos kilómetros y se hace algo dura, aunque niños de 10 años la realizaron, las vistas compensan como verás en las fotografías. En total algo más de tres horas de camino, que en la primera opción, sin duda se verán rebajadas a dos y será mucho más sencilla sobre todo si vamos con niños pequeños.
