El alcalde de Ponferrada, Marco Morala, acompañado por el concejal de Urbanismo, Roberto Mendo, encabezó la visita inaugural al inicio de las obras de la tercera fase de remodelación en la calle General Gómez Núñez y zonas adyacentes. La jornada del martes fue testigo del comienzo de esta importante intervención que abarca el tramo entre la glorieta del IESVE y la avenida de Valdés, así como las calles Lago de La Baña y Obispo Mérida.
Con un presupuesto de 1.016.218,69 euros y un plazo de ejecución de cinco meses a cargo de la empresa Excarbi, estas obras marcan un hito en la regeneración urbana del centro de Ponferrada. Según explicó Morala, la transformación incluirá la unificación del sentido de circulación en la calle General Gómez Núñez hacia la plaza de Lazúrtegui, con calzadas más amplias y aceras renovadas, en un esfuerzo por respaldar a los comerciantes locales y revitalizar la zona.
El alcalde expresó su agradecimiento por el apoyo financiero, con el Ayuntamiento de Ponferrada cubriendo el 64% del presupuesto, la Junta de Castilla y León el 30%, y el 6% restante a cargo del Ministerio de Fomento. En este contexto, Morala destacó el esfuerzo conjunto de las instituciones para llevar a cabo esta importante iniciativa.
Además de las mejoras urbanísticas, Morala anunció el avance en la creación de una nueva ordenanza para la Zona de Bajas Emisiones de Ponferrada. El borrador, ya finalizado, será presentado en el pleno en un futuro cercano. Este nuevo marco regulatorio establecerá restricciones al tráfico solo en casos de superación de umbrales de contaminación perjudiciales para la salud, enfatizando que en la actualidad no se enfrentan tales desafíos debido a la ausencia de una central térmica en Lazúrtegui. Asimismo, el régimen sancionador se aplicará únicamente cuando se active la ZBE, proporcionando un enfoque equilibrado para proteger tanto el medio ambiente como los intereses de la comunidad.
