La música electrónica española, y muy especialmente la escena berciana, está de luto. Óscar Vázquez, uno de los artistas más talentosos y queridos de la comarca, ha fallecido a los 48 años tras una larga enfermedad, dejando atrás una carrera brillante que traspasó fronteras y un vacío imposible de llenar.
Su historia con la música comenzó de forma autodidacta a los 17 años, cuando desarrolló un interés apasionado por la electrónica. Con un talento extraordinario que no dejó de crecer, se sumergió en los entresijos de la mezcla, especializándose en los sonidos progressive, un sello que marcaría toda su trayectoria.
Su carrera profesional despegó en el año 2000 en las cabinas del legendario club berciano R2, donde empezó a forjar su nombre y a ganar una legión de adeptos. Su proyección fue imparable, llevándolo a actuar en clubs y festivales de medio mundo, desde Rusia, Argentina e Inglaterra, hasta Austria, Croacia y Eslovenia, donde su habilidad en los platos era recibida con admiración.
Sin embargo, fue en 2002, cuando se estrenó como productor, donde encontró su verdadera vocación. La creación de su propia música se convirtió en su pasión, desarrollando un sonido melódico y refinado que pronto captó la atención de sellos discográficos internacionales. Su música fue publicada por prestigiosas casas como Beatfreak, Particles, Dopamine Music o Balkan Connection, entre muchas otras.
En 2017, dando un paso crucial en su carrera, fundó junto al también berciano Pablo Muñiz su propio sello, The Way Records, un proyecto con el que buscaba dar forma a su visión musical. El reconocimiento a su trabajo como productor fue tal que sus temas llegaron a ser pinchados y elogiados por DJs consagrados a nivel global como John Digweed, Hernán Cattáneo, Markus Schulz o Nick Warren.
Su labor también se extendió a las ondas radiofónicas, colaborando con espacios de radio en España, Argentina, Estados Unidos, Canadá y Alemania, siempre llevando su sonido a todos los rincones.
Comprometido con la expansión de la cultura de la música electrónica, formaba parte de dos colectivos nacionales: Electronic Colors en Madrid y Origen Vibes en Ponferrada. Desde esta última agrupación, dedicada a abrazar la escena underground y promocionar nuevos talentos, sus compañeros Toni Llamas, Pablo Muñiz y Dave Doma han compartido un sentido comunicado en el que aseguran que “el legado de Óscar Vázquez trasciende la vida, y habitará en la música y en nosotros eternamente”.
En definitiva, El Bierzo y la escena electrónica internacional pierden a un artista prodigioso, una referencia y un maestro para muchos. Óscar Vázquez se marcha físicamente, pero su esencia, su pasión y su inmenso legado musical permanecerán para siempre, sonando en cada acorde que inspiró y en cada corazón al que llegó su música.
