Se trata de un proyecto en el que se ha respetado completamente la fachada del edificio, así como algunos de los elementos más característicos de su interior como la impresionante escalera de madera de principios del siglo pasado. El resto del edificio se ha rehecho de nuevo para cumplir las exigencias de accesibilidad y seguridad actuales, como la incorporación de un ascensor. Será un complejo hotelero compuesto por 12 amplias habitaciones de entre 17 y 24 metros cuadrados, sin incluir el baño. Un moderno restaurante y una prometedora terraza para los calurosos veranos completan esta nueva oferta hostelera en Cacabelos.
Los responsables de la recuperación de este emblemático hotel son una familia de emigrantes bercianos afincados en París y sus dos hijos: Romain y Mónica Barredo, un ilusionante proyecto del que también forma parte Manuel, cacabelense y pareja de una de las hijas, que nos ha mostrado el estado de las obras.
Hotel Miralrío, un hotel con mucha historia
El Hotel Miralrío se abrió en Cacabelos a finales de los años 40 ó principios de los 50 X (no hay documentación al respecto). Carlos de Francisco, autor del blog Castroventosa, recuerda en una publicación cuando Antoni Ramallets, portero internacional del FC Barcelona en la década de los 50, se hospedó en el hotel, causando un colapso de vecinos intentando verlo a las puertas del Hotel. También descendientes de los antiguos propietarios recuerdan el paso de Aga Khan III, Imán de los ismaelitas Nazaríes, aunque se desconoce el motivo por el que paso por el Bierzo.
Otra de las anécdotas que Carlos de Francisco apunta, es la luctuosa muerte del deportista Juanito Vázquez ‘la flecha ferrolana’ (Abuelo del popular presentador Jesús Vázquez) el exjugador del Racing de Ferrol, el Atlético Aviación y el Deportivo de la Coruña cuando dirigía el equipo ferrolano en un partido en Burgos, el 14 de abril de 1957, durante el mismo, el entonces entrenador se encontró indispuesto y falleció de un síncope.
Para evitar demorar el traslado del cadáver por temas burocráticos, el equipo viajó con el cuerpo del entrenador en el autobús hasta Cacabelos y allí firmaron el acta de defunción, conforme a que había fallecido en las instalaciones del hotel, como explicó la mujer del jugador muchos años después en una entrevista.
El Hotel Miralrío fue creado por Don Ángel, a finales de la década de los 40 o principios de los 50, a Don Ángel le acompañó su esposa Josefa e hijos Manolita, Gelines, Fefi y Pepe. muchos cacabelenses recordarán el patio en el que llegó a contratar orquestas para realizar bailes siguiendo la estela de los hoteles madrileños.
Durante varias décadas, el Hotel Miralrío se reconvirtió en viviendas y en febrero de 2020, unos días antes del confinamiento, lo adquirieron los actuales propietarios, que han tenido que esperar casi dos años para poder comenzar las obras de este bello hotel.
La nueva propiedad confía en poder abrir al inicio del verano la terraza, casi 500 metros con jardín, el hotel tendrá que esperar un tiempo a la finalización de las obras.
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