Las futuras oficinas corporativas de Tvitec | Cricursa en Cubillos del Sil no solo cambiarán de imagen, sino que se transformarán en un manifiesto arquitectónico de la propia empresa. El proyecto ganador del concurso de ideas, diseñado por el estudio BAW del arquitecto ponferradino Fran Balado, revela cómo será la remodelación de la sede, que aspira a convertirse en un escaparate de las posibilidades del vidrio arquitectónico.
La propuesta, que se alzó con el primer premio y está prevista para ejecutarse en 2025, se articula en torno a dos objetivos principales que ya se han desarrollado conceptualmente.
Un “corazón” que organiza y ilumina
La distribución interior del edificio girará en torno a lo que los arquitectos denominan el “corazón” del proyecto. Este núcleo central está constituido por tres espacios fundamentales que se superponen en las sucesivas plantas y que garantizan una circulación fluida y una entrada optimizada de luz natural.
Este eje vertebrador lo forman:
- El acceso principal: La puerta de entrada al conjunto.
- El vestíbulo: Un espacio de recepción y bienvenida.
- El patio central: Un elemento clave que inunda de luz las estancias interiores y mejora la calidad espacial.
Una fachada que es la marca de la empresa
El segundo gran pilar del proyecto es la creación de una nueva fachada que cumple una doble función: integrar el edificio en su entorno industrial y, lo que es más innovador, actuar como un catálogo físico de los productos y el saber hacer de Tvitec.
La solución planteada es una fachada técnica que combina un muro cortina con una cámara de aire, lo que aporta una solución ventilada de alta eficiencia. El diseño incluye un remate en forma de visera en cada planta, un elemento que será fabricado con Rocalux –un material de la compañía– y que permitirá su iluminación integrada. Este feature no solo define la estética del edificio, sino que transformará por completo su imagen durante la noche, creando una identidad corporativa luminosa y moderna.


